sin tener que "chutarse"
"De siempre" sabemos que la primavera trae consigo astenia, pero quienes lo "saben a ciencia cierta" son los laboratorios, que en los días previos al nacimiento de la estación, así como en las primeras semanas de la misma, a través de la televisión nos bombardean con unos anuncios que ya no dicen "para los síntomas del resfriado...", sino "para el cansancio, el agotamiento..." En tanto que en las farmacias puede verse que en sus escaparates principales aparecen todos los complejos químicos destinados a "despertar" al adormilado habitante de la primavera.
Según explican los expertos, uno de los elementos que provocan la astenia es la diferencia de horas de luz. Además, las fases lunares determinan cambios en las las presiones atmosféricas. De hecho la primera quincena de los meses primaverales suelen dar más síntomas de astenia por acelerar el aumento de la temperatura del cuerpo y por agitar más la sangre, incrementando la llegada de toxinas de las células al torrente circulatorio, para ser eliminadas finalmente por los riñones.
En los días de "brotes" la apariencia de la vejetación mejora a la vista del ser humano, pero las planta están que trinan, puesto que sus carnes se abren provocándoles molestias y hasta "dolores". Pues bien, el ser humano también tiene brotes en la primavera y, en el comienzo de la misma, parecen las medio olvidadas migrañas, lumbalgias, cervicalgias, acné, manchas en la piel y, junto con el polen, las alergias.
En primavera los acupuntores comenzaremos con el VB34, porque los músculos serán los que darán la alarma: contracturas, calambres, etc. y porque la víscera a regular será la vesícula biliar, víscera protectora del órgano maltratado (hígado). Aplicaremos acupunción en el 3 y 8 H y, por supuesto, tendremos en cuenta que el riñón es el que aplaca el fuego de H, por tanto utilizaremos el 3 - 7 y 10 R. Y, como cada casa es un mundo y cada caso diferente, regularemos aquello que haga falta en cada humanidad en particular.
El café, y el resto de compuestos químicos que están a la orden del día en nuestra sociedad, solo nos dan un plus de euforia que, una vez pasado su efecto y al haber consumido una mayor cuota energética, nos lleva a un estado de hundimiento aún mayor que el natural estado de "astenia primaveral".
Diversas fuentes de información y experiencias clínicas personales.